Comerciante de Cárdenas en Táchira dice que las ventas disminuyeron durante los últimos dos meses

NTA conversó con Viviana Sandoval, quien durante ocho años trabajó como ayudante de limpieza en distintos lugares antes de decidir emprender su propio negocio. Ahora, vende pasteles, empanadas, papas rellenas y otros productos en el estado Táchira.

Inicios como comerciante

Viviana recuerda sus inicios como comerciante con cariño. "Hace casi un año que abrí este puesto. Antes, me dedicaba a la limpieza y mantenimiento por mi cuenta. Pero siempre tuve el sueño de tener mi propio negocio de comida". Con una sonrisa, agregó que ya lo tenía planeado y que este emprendimiento le permitió distribuir su tiempo de acuerdo a las necesidades de su familia.

Desafíos recientes

A pesar del éxito inicial de su negocio, Viviana ha enfrentado desafíos recientes. "Gracias a Dios, me ha ido muy bien", dijo Viviana. Sin embargo, en los últimos dos meses, las ventas han disminuido. "No sé si es por la economía o qué, pero ahora las ventas están bajas para todos los comerciantes de Táchira", comentó con preocupación.

La lucha de Viviana no es solo personal; siete personas dependen de su negocio para sobrevivir. Su familia incluye a su mamá, tres hijas, nieta y esposo. "Ha estado bastante rudo", admitió. "No solo para mí, sino para muchos comerciantes del estado Táchira". Ella trabaja en la plazuela de Táriba y afirmó que otros comerciantes también están en la misma situación.

Jornada laboral y esfuerzo familiar

Desde las 4:30 de la mañana, Viviana está en su puesto de empanadas, pasteles y jugos naturales. A veces se levanta desde las 2 de la mañana para preparar los alimentos. "Mi esposo también trabaja duro, pero en estos momentos soy prácticamente, la cabeza del hogar. Ha estado difícil para todos", dijo la comerciante tachirense.

A pesar de los desafíos, su espíritu emprendedor sigue intacto. Casi no descansa y aprovecha la mayor cantidad de tiempo posible para trabajar, a menudo con el apoyo de sus hijas en su lugar de trabajo. Dice no arrepentirse de tomar la decisión de emprender y formar parte de los comerciantes tachirenses que luchan por sus sueños.

Reflexión y esperanza

Viviana Sandoval es un ejemplo de resiliencia y dedicación. A pesar de las dificultades económicas recientes, su compromiso con su negocio y su familia es inquebrantable. Su historia refleja la realidad de muchos comerciantes en Táchira que, a pesar de los desafíos, continúan trabajando arduamente para alcanzar sus metas y proporcionar un futuro mejor para sus seres queridos.

Fuente: NTA

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